Estrés en los perros
Los perros son fieles compañeros y a menudo reflejan nuestros propios sentimientos. Pero, al igual que nosotros, los humanos, los perros también pueden sufrir estrés. El estrés en los perros es un problema que a menudo se subestima y que puede tener repercusiones importantes tanto en el bienestar de su amigo de cuatro patas como en su relación. Es importante comprender que el estrés no es sólo una reacción a corto plazo ante una situación desconocida, sino que puede tener graves consecuencias para la salud si se vuelve crónico. En este artículo descubrirá qué puede desencadenar el estrés en los perros, cómo reconocer los signos y qué medidas prácticas pueden adoptarse para aliviarlo. También se examinan las opciones de tratamiento y los descubrimientos científicos sobre este tema, para que esté bien informado.
Sabías que un estudio sueco de 2019 descubrió que los niveles de estrés de los perros a menudo se correlacionan estrechamente con los de sus dueños? Esto demuestra lo importante que es tu propio comportamiento para tu perro. Sumerjámonos juntos en este importante tema para comprender y apoyar a tu amigo de cuatro patas.
Por qué se estresan los perros?
El estrés es una reacción natural del organismo ante situaciones potencialmente peligrosas o desafiantes. En los perros, el estrés puede ayudarles a responder a las amenazas a corto plazo, pero a largo plazo puede ser perjudicial para su salud. El estrés crónico puede provocar problemas de comportamiento, un sistema inmunitario debilitado e incluso dolencias físicas como problemas gastrointestinales.
Los estudios demuestran que los perros estresados durante mucho tiempo tienen un mayor riesgo de sufrir enfermedades cardiacas. Un estudio realizado por la Universidad sueca de Linköping en 2019 descubrió incluso que los niveles de estrés de los perros se correlacionan estrechamente con los de sus dueños. Por lo tanto, tu propio bienestar influye directamente en tu amigo de cuatro patas.
Cómo puedes reconocer el estrés en tu perro?
Los signos de estrés en los perros pueden ser sutiles, pero con atención y conocimiento puedes reconocerlos a tiempo. He aquí algunos de los síntomas más comunes:
- Lenguaje corporal: cola recogida, orejas pegadas, jadeo sin esfuerzo u ojos muy abiertos ("ojos de ballena").
- Cambios de comportamiento: Inquietud, aumento de los ladridos, esconderse, agresividad o ansiedad repentina.
- Síntomas físicos: Diarrea, vómitos, pérdida de apetito o aumento del lamido de las patas.
- Comportamiento evasivo: Bostezo, sacudida o rascado en situaciones que no dan motivo para ello.
Si observas uno o varios de estos signos, conviene identificar el desencadenante.
Causas del estrés en los perros
El estrés puede desencadenarse por diversos factores, entre ellos
- Cambios en la vida cotidiana: mudanzas, nuevos miembros de la familia o alteración de las rutinas.
- Estímulos ambientales: ruido, demasiada gente o lugares nuevos.
- Presión social: conflictos con otros perros o expectativas demasiado altas por parte del propietario.
- Molestias físicas: Dolor o enfermedad.
- Falta de ejercicio: tanto la sobrecarga como la infracarga mental pueden causar estrés.
¿Cómo puede ayudar a su perro? Consejos y trucos
Hay varias formas de combatir el estrés en los perros:
- Identificar y evitar los desencadenantes del estrés: Llevar un diario para reconocer patrones.
- Cree refugios: Un lugar seguro, como una guarida o una cesta, ayudará a su perro a relajarse.
- Mantenga una rutina: A los perros les encanta la previsibilidad. Mantén los horarios de comida, paseo y sueño lo más constantes posible.
- Ejercicio mental: Los juguetes inteligentes y los juegos de búsqueda pueden ayudar a mantener ocupada la mente de su perro.
- Envíe señales tranquilizadoras: Las caricias suaves, las palabras suaves y los ejercicios respiratorios específicos pueden tranquilizar al perro.
- Aceites esenciales: El aceite de lavanda puede tener un efecto calmante en grandes cantidades. Precaución: No todos los aceites son adecuados para los perros.
Medicación y terapias
En casos graves, cuando otras medidas no son suficientes, existen las siguientes opciones:
- Medicación: existen ansiolíticos y tranquilizantes para perros. No obstante, deben utilizarse siempre con el asesoramiento de un veterinario.
- Terapia conductual: un adiestrador canino o un especialista en conducta puede ayudar a tratar los comportamientos que provocan estrés.
- Fisioterapia y masajes: pueden reducir la tensión muscular.
Datos útiles sobre el estrés en los perros
- Hormonas: La hormona cortisol se libera durante el estrés. Un nivel elevado de cortisol durante un largo periodo de tiempo puede debilitar el sistema inmunitario.
- Musicoterapia: La música clásica puede tener un efecto calmante. Incluso existe música especialmente desarrollada para perros.
- Sincronización: Los perros suelen adaptarse al nivel de estrés de su dueño. Por lo tanto, su propia calma también ayuda a su perro.
- Solución a largo plazo: la reducción del estrés es un proceso. La paciencia y la constancia dan sus frutos.
Conclusión
El estrés en los perros es un problema grave que no debe ignorarse. Su perro confía en que usted comprenda sus necesidades y le apoye en situaciones difíciles. Identificando los factores desencadenantes del estrés, manteniendo una rutina equilibrada y buscando ayuda profesional si es necesario, puede ayudar a su perro a llevar una vida relajada y feliz.
Recuerde que la gestión del estrés no se consigue de la noche a la mañana. Requiere tiempo, paciencia y sensibilidad. Pero la recompensa es un vínculo más profundo y una vida más sana y feliz para su amigo de cuatro patas. Juntos podréis superar los retos y construir una relación sólida basada en la confianza y la comprensión.
Regla de Tradidog: Disfruta, duerme, come ... no te estreses ni estreses a tu perro.
Y por último, un vídeo importante y emocionante que profundiza en el tema y lo pone bajo la lupa.
Compartir